PREGUNTA N° 64
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EL MÉTODO DE PERCEPCIÓN ESPIRITUAL
¿Quiere por favor aclarar el problema de la percepción? ¿Cómo "conoce" el investigador en los planos superiores? Por esto quiero decir: (a) cómo puede él distinguir entre un pensamiento-forma que emana de su propia mente, (b) el pensamiento-forma que emana de alguna otra persona, ya sea encarnada, o libre del organismo y (e) entidades espirituales objetivas?
Respuesta: Contrariamente a la opinión de la persona que no sabe nada del asunto, esto es solamente una cuestión de entrenamiento. Es absolutamente erróneo suponer que porque uno que ha podido desarrollar la visión espiritual y le es posible ver cosas en los mundos que
generalmente son invisibles a la visión común de la gente en el actual estado de la evolución,
dicha persona, por la misma facultad conoce todo. En realidad no sabe nada hasta que por la
investigación adquiere el conocimiento. La ley de analogía, que es la llave maestra para todos los misterios, debiera hacer claro esto: “Como arriba, es abajo” y “Como abajo, es arriba”.
Vemos el teléfono que cuelga en la pared, sabemos cómo usarlo, tomando el receptor, colocándolo en nuestro oído y hablando por el transmisor. Sabemos también, aunque de un modo vago, que opera por medio de la electricidad, pero el mecanismo es un misterio para la
gran mayoría.
Similarmente, podremos dar vuelta a un interruptor eléctrico, ver que las luces se encienden, y que los motores comienzan a funcionar. Vemos el fenómeno, pero nada sabemos de las fuerzas subyacentes hasta que por la investigación nos hemos capacitado, y adquirido el conocimiento. Esas mismas condiciones se manifiestan en el Mundo del Deseo y en un grado
aún mucho mayor, debido a la superlativa plasticidad de la substancia de deseos y la facultad
con la cual es cambiada en formas diferentes por el Espíritu que las anima, ya sea un superhumano o un elemental. Por esa condición, aún la persona que tiene el dominio voluntario de la visión espiritual, requiere un entrenamiento completo y debe cultivar la facultad de ver más allá de la forma, ver la vida que la anima. Solamente cuando ha cultivado esa facultad es libre de engaño y capaz de poder distinguir la verdadera naturaleza y estado de todas las cosas y seres que encuentra en el mundo invisible. Para lograr esto de la manera más eficiente y tener la certeza de escapar a la ilusión, es necesario cultivar el grado de visión espiritual que corresponde a la región concreta del Mundo del Pensamiento, donde los arquetipos que son la vida que anima, pueden verse.
Aclarando el asunto, debemos tener en cuenta que la visión física varía, de manera que existen ciertos seres que ven perfectamente bajo condiciones que a nosotros aparecen oscuras. Por ejemplo, las lechuzas y los murciélagos. Los ojos de los peces están formados de modo que puedan ver bajo el agua. Los órganos de la visión espiritual son también capaces de ser sintonizados a diferentes vibraciones. Cada grado de vibración produce una clase diferente de visión y abre al investigador cierta región de la naturaleza. Por una muy ligera extensión de la visión física los éteres, y los seres que viven en ellos se vuelven plenamente visibles. Esta clase de visión puede compararse a los rayos X, pues los objetos que aparecen sólidos a la visión física son más fácilmente penetrados por la vista o visión etérica.
Cuando uno mira una casa con la visión etérica, ve a través de las paredes. Si se trata de saber qué es lo que pasa en un cuarto en el lado más lejano de la casa, desde el lugar donde está uno parado, los rayos etéricos de sus ojos hacia el objeto en ese cuarto atraviesan las paredes tan fácilmente como si la casa entera fuera hecha de cristales. Esta clase de visión puede ser aplicada al organismo humano, y con su auxilio es posible mirar a través de todo, la estructura del cuerpo y contemplar sus funciones en plena manifestación. El autor también tenia la idea, hasta hace poco, de que el truco común de poder leer una carta que esté en un sobre cerrado, posiblemente en la bolsa de otra persona, era hecho de la misma manera. Sin embargo, estimulado por los artículos sobre psicometría de nuestro magazine, un día tomó una carta dirigida a él y probó el experimento, que tuvo un éxito maravilloso, mostrando a la persona que la había escrito sentado en su cuarto, y dando el contenido total muy bien.
Inmediatamente después hizo la prueba con otra carta, con la visión etérica, para asegurarse cómo habría de diferir el resultado, y entonces fue encontrado que era muy difícil desenredar la escritura debido a que la carta había sido doblada. Parecía haber una masa, una aglomeración de rayas de tinta, y requirió el uso del siguiente grado de visión que penetra hasta el Mundo del Deseo, antes de que pudiera distinguirse y leerse la carta.
Cuando uno mira un objeto con la visión necesaria para ver el Mundo del Deseo, aún los más
sólidos objetos son también vistos a través, pero con la diferencia de que uno los ve como desde todas las direcciones. Los pensamientos formas como a los que se refiere el que pregunta, probablemente estaban envueltos en este material, porque ningún pensamiento forma puede compeler a la acción, salvo por medio de esta fuerza-materia a la que llamamos
substancia de deseos, y nadie que no haya hecho un estudio de ella puede imaginar cuánta gente actúa por pensamientos formas que creen ser propios pero que, en verdad, tienen su origen en el cerebro de otra persona. Es de esta manera como se origina eso qué llamamos opinión pública. Grandes pensadores que tienen ciertas ideas definidas sobre alguna cosa particular, radian de sí mismos esos pensamientos-formas, y otros, menos positivos y no antagónicos al punto de vista expresado en estos errantes pensamientos-formas, los captan y piensan que estos pensamientos tienen su origen en ellos. Así, gradualmente crece el sentimiento hasta que lo que fue originalmente comenzado por una persona, ha sido aceptado por la gran mayoría de la comunidad.
Para conocer positivamente el origen de tales pensamientos-formas errabundos, se necesitaría un examen por medio de la clase de visión apropiada para funcionar en la Región del Pensamiento Concreto, donde primeramente tomó forma la idea.
Allí todos los objetos sólidos aparecen como vacuas cavidades en las cuales suena, continuamente, una básica nota-clave, y así, quienquiera que ve una cosa también escucha en ella la historia completa de su ser. Pensamientos-formas que todavía no se han cristalizado en acción o formas físicas, no se muestran al observador como cavidades, pero allí, los pensamientos no son silenciosos. Hablan en un lenguaje que es inconfundible y comunican con muchísima más exactitud que lo hacen las palabras, cuál es su intención, hasta que la fuerza que usó su originador para hacerlos manifiestos se gasta. Como ellos, en la clave particular de la persona que los hizo nacer, es comparativamente fácil, para el ocultista entrenado, seguir la pista de su fuente.
Con respecto a la parte (e) de la pregunta, no está muy claro lo que quiere saberse. Si se desea conocer cómo podemos distinguir los pensamientos de entidades espirituales objetivas, de nuestros propios pensamientos, el método anterior puede ser aplicado a todos los seres sin distinción de persona alguna. Pero si la pregunta significa cómo distinguir a las entidades espirituales objetivas de los pensamientos-formas, la respuesta es que dichos pensamientos formas carecen de espontaneidad. Son más o menos como autómatas. Se mueven y actúan en una sola dirección de acuerdo con la voluntad del pensador, que es el poder impulsor en ellos.
Las acciones de las entidades espirituales objetivas son espontáneas y variables de la misma
manera que nuestras acciones o tácticas lo son cuando quiera que deseamos, o nos parece conveniente cambiarlas.
del libro "Filosofía Rosacruz en Preguntas y Respuestas"
Tomo Segundo, de Max Heindel
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